En entrevista con American Songwriter, el bajista de KISS, Gene Simmons habló para promocionar sus nuevos bajos que lanzó a la venta en conjunto con Gibson. Pero esta vez, el Demonio también escarba en sus recuerdos y nos platica cómo fue la primera vez que la banda más caliente del mundo se puso el maquillaje que los hiciera una leyenda reconocible en todo el mundo:
«Estábamos en una trampa de fuego infestada de ratas, ahí ensayábamos, nosotros estábamos tratando de hacer la banda que nunca habíamos visto en escena. Inicialmente nos llamamos Wicked Lester. Decidimos cambiarnos el nombre porque Wicked Lester obtuvo un contrato discográfico. Hacíamos música del tipo de los Doobie Brothers y Three Dog Night; tres partes de armonía, esa clase de cosas. Obtuvimos un contrato discográfico de Epic, Pero Paul Stanley y yo no creíamos en ello, así que nos hicimos a un lado de ese contrato y decidimos regresar al paso uno, que es hacer simplemente lo que creemos, Nosotros éramos grandes anglófilos. Lo que los Ingleses hicieron al tomar la música negra de Estados Unidos y hacer algo propio, era interesante para nosotros. Claramente los Beatles, pero también los Stones, The Who, Humble Pie. Saben, los grandes, Zeppelin, desde luego. Así que decidimos hacer la banda que nunca habíamos visto. Pero también notamos que todos tenían cabello largo y trataban de hacer cosas andróginas. Así que, ¿porqué no hacer algo propio? Así que un día, uno de nosotros, no recuerdo quién, dijo que fuéramos a Woolworths, la cual era una tienda departamental, a comprar algo, no sé, vamos a pasar el rato y a comprar cosas. Así que fuimos y compramos espejos y maquillaje de payaso. Recuerdo que costaba $15 dólares. Llevamos las cosas a nuestro desván y sin alguien más con nosotros, sólo nosotros cuatro, comenzamos a ponernos el maquillaje. No teníamos idea de lo que estábamos haciendo. Lo irónico es que era muy parecido a lo que seguimos usando hoy en día. Casi cincuenta años después.»